Se dice que no es oro todo lo que reluce, pero si reluce, ¿qué es? Entre bambalinas los nervios están a flor de piel. Las prisas, los últimos retoques, los gritos y a veces, hasta las lágrimas. No, no es que no sea oro, es todo lo que hay detrás, lo que es real, el esfuerzo del resultado final, bonito ante nuestros ojos, del disfrute del espectador. Todo lo que está pasando y tiene que pasar para que todo llegue a nuestros ojos de la manera que el diseñador nos quiere mostrar.
Es cierto que desde fuera, nos da la sensación de fácil, pero no lo es. Detrás están las modelos, agotadas después de andar más de 5 km diarios, subidas a unos tacones de más de 12 cm, los equipos de Cristina Rivero y Ana Camero, (maquillaje y peluquería), que año tras año, nos acompañan, siguiendo las instrucciones directas del diseñador, otras las de nuestro director artístico, Pedro González, y muchas veces, de ambos. Las vestidoras que deben llevar un orden milimetrado de las salidas cada modelo y cada diseño, previamente estudiado por nuestra directora de moda, Blanca Morales. La coreografía diseñada por el director artístico, cada una con los cambios que requieran las diferentes colecciones. Todo esto se mezcla con los nervios de cada diseñador, los miedos, las ganas de se vean sus creaciones, de que todo salga perfecto, y así un largo etcétera que da como resultado, todo lo que hay detrás y también es bello. Sólo para vuestros ojos, el BackStage.
Fotos: @chemasoler_fotografobodas